Por qué el trabajo en casa nunca se acaba

¿Tienes la sensación de que el trabajo en casa nunca se acaba?

Hoy quiero enfocar tu mirada a los objetos que tienes en casa y que tomes consciencia del trabajo que hay detrás de cada uno de ellos, para que puedas decidir si te compensa el hecho de tenerlos o si por el contrario prefieres decirles adiós.

No sé si a ti también te pasa, pero hace tiempo me costaba entrar en casa, era de las que prefería pasar mi tiempo libre fuera porque, al entrar en casa, me daba la sensación de que había tanto que hacer, me parecía que las tareas nunca se acababan, incluso cuando ya había hecho todo lo que tenía previsto hacer me daba la sensación de que algo todavía estaba pendiente.

Ahora esa sensación no te voy a decir que haya desaparecido, pero se ha reducido enormemente.

¿Quieres saber por qué pasa eso y cómo hacer que esa sensación se reduzca al máximo?

¡¡Pues dale al play!!

¿Te habías dado cuenta del trabajo que tiene implícito un simple objeto? ¿Tienes algún truco para acortar el tiempo que dedicas a ordenar?

Deseando leer tus comentarios

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.